EL LUGAR QUE DAMOS FORMA

Las calles que transcurrimos contienen historias que se cuentan con los pasos dejados en la calzada, deponiendo un territorio habitado, registrando las huellas, apropiándose del camino. 

Estos espacios de comunicación invisibles, inscriben una fracción de la vida, como rastros de fragmentos, de sucesos, escriben historias, que antes estuvieron contadas por otros; vestigios de memoria, que podrían ser rasgos que se acumulan, aunque a veces queden en el olvido, al atender al tránsito cotidiano. 

Las calles no son solo, un espacio de circulación, sino una representación gráfica de la vida, de los sucesos que se han ido constituyendo con el transcurrir de los días, en los repertorios de relaciones cambiantes que mantienen los unos con otros. 

Al caminar en las calles se podría imaginar las historias que contienen, que no surgen necesariamente de un plan consciente, sino simplemente de lo que la gente hace, siente, percibe y llega a articular en su búsqueda de significado para su vida cotidiana, con rastros graduales, de la vida individual o colectiva. 

Desde la mirada de cada uno se puede revelar el significado, cada persona le pone un nombre y la muestra a otros para que se ancle en su historia personal; el espacio caminado es un lugar ejercido, de esta forma, la calle geométricamente definida por el urbanismo se transforma en espacio por intervención de los transeúntes, la misma que se podría comparar con la lectura que es el espacio producido por la práctica del lugar que constituye un sistema de signos: un escrito.

En fin, las calles en las que se circula serían el lugar que le damos forma y sentido simbólico a la presencia de cada uno en este mundo, sea con el recorrido habitual en el fácil acceso o un cambio de dirección del momento inesperado, emancipando la imaginación con posibilidad de encuentros lejos de la rutina. 

Es tu camino que se vive de forma ciega, o es acaso tu camino, aprehender la distancia recorrida o la que aún queda por recorrer. No cierres los ojos, sigue aquellos mapas dibujados que trazan la ruta del camino que lleva al alma.